La actriz de 51 años tiene un metabolismo que cualquier mujer desearía, pues le cuesta horrores coger peso y mantenerse en una talla regular. "Tengo que tener cuidado para no quedarme demasiado delgada. Siempre me estoy moviendo y no soy ese tipo de persona que podría sobrevivir a base de ensalada. Me encanta cenar un buen filete y estoy obsesionada con encontrar la hamburguesa perfecta. Hacen una en el Tower Bar de Los Ángeles que viene con un panecillo inglés con rúcula y queso brie, y se sirve con patatas a la francesa y aceite de trufa. Realmente me encanta", confesó la artista. Sin embargo, Sharon, que tiene tres hijos pequeños adoptados, no deja completamente su cuerpo al azar, y procura mantenerse en forma. "Hago pilates, monto en bici y en canoa, y camino. Intento subir las escaleras en vez de coger el ascensor y persigo a mis hijos". Sharon no es la única estrella de Hollywood que está enamorada de la comida calorífica: Penélope Cruz reveló que se comió una hamburguesa justo antes de ganar el Oscar por 'Vicky Cristina Barcelona', y Nicole Richie comía un montón de hamburguesas durante su segundo embarazo
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