El príncipe Enrique y Chelsy Davy, que rompieron el pasado enero, se citaron en el barrio londinense de Notting Hill para una cena romántica, según publica 'Hello!'. Después de semanas de encuentros en clubes, que abandonaban por separado, y de rumores de que habían vuelto y flirteaban en Facebook, por fin se dejaron ver juntos y sonrientes, una imagen que no se repetía desde principios de año.
Al parecer, la velada sirvió para celebrar por anticipado el 24 cumpleaños de Chelsy y el éxito del examen de Harry, que ha completado el curso básico de formación de vuelo de la RAF Shawbury. El restaurante, el Beach Blanket Babylon, es una casa georgiana, conocida por su decoración, donde aparecieron sin previo aviso y se sentaron en un rincón al lado de una chimenea y a la luz de las velas.
El propietario del local, Robert Newmark, fue la única persona que habló con la pareja tras la cena, cuando se reunieron con dos amigos, explicó que fue "una velada muy íntima y acogedora". "Me acerqué a hablar con Chelsy y ella me preguntó dónde podía fumar. Estuvieron juntos y muy relajados durante toda la velada y sólo se separaron cuándo Chelsy se levantó para fumarse un cigarrillo", añadió. Al llegar los dos amigos, Newmark los llevó a un reservado, donde les sirvió un 'special martini'. Después, se marcharon al club Whisky Mist, en Mayfair, donde estuvieron con dos de las primas de Enrique, las princesas Eugenia y Beatriz.
Los amigos de Harry y Chelsy siempre dijeron que a pesar de haber puesto fin a su noviazgo seguían sintiendo algo el uno por el otro y parece que acertaron. Uno de los motivos de su ruptura fue la distancia, ya que la decisión del hijo pequeño de Carlos de Inglaterra de volver a Afganistán no gustó a la joven sudafricana, que veía que para él su trabajo era lo primero.
Harry espera ir de nuevo a Afganistán, pero esta vez no luchará en primera línea, sino que irá con el Ejército Cuerpo Aéreo, pero antes de eso tendrá que terminar la siguiente fase de aprendizaje del manejo de helicópteros que durará seis meses.
Eso significa que hasta comienzos del mes de mayo, por lo menos, estudiará en una academia que, en esta ocasión, está más cerca de Chelsy, en Hampshire, de lo que lo estaba la anterior. Ella, mientras tanto, seguirá en Londres preparándose para trabajar como abogada para la firma Allen & Overy, con lo que podrán estar más tiempo juntos