Britney Spears volvió a ser noticia durante su primera gira por Australia, debido a una disputa acerca del uso de pistas de audio pregrabadas y una presentación mediocre, críticas que según el promotor de la gira la dejaron "extremadamente molesta".
Medios australianos publicaron que sus seguidores habían abandonado la primera de las 14 presentaciones en Australia de la artista, ofrecida el viernes en Perth, después de unas pocas canciones, describiéndola como "aburrida", "forzada", sin interpretación en directo, sino sólo mímica, y sin interacción con el público.
Pero el promotor de la gira por Australia del disco 'Circus', su representante y algunos seguidores se apresuraron a salir en su defensa, diciendo que estos ataques habían dejado muy mal sabor de boca a la cantante estadounidense.
"Britney está al tanto de la situación y está muy molesta por lo que se ha dicho", ha manifestado al diario 'The Australian' Paul Dainty, promotor de la gira de Spears. "Ella es un ser humano. Estoy avergonzado de ser parte de los medios australianos cuando veo este tipo de noticias totalmente inexactas".
Dainty dijo que es mentira que los seguidores comenzaran a abandonar el espectáculo a la tercera canción, después de haber pagado entre 200 y 1.500 dólares para ver a la cantante.
Spears ha estado en el centro del debate sobre el uso de 'playback' desde que llegó la semana pasada a Australia, aún cuando no es un secreto que utiliza el recurso cuando baila en su espectáculo, que gira en torno a una temática circense.
No obstante, los responsables del Burswood Dome en Perth, donde se presentó Spears, dijeron a los periodistas locales que no habían recibido ninguna queja de las 17.000 personas que asistieron al concierto. Una cantidad similar acudió a la presentación que Spears ofreció la noche siguiente.
