Milla Jovovich no quiere convertir a su hija en una estrella

Milla Jovovich, que comenzó a hacer sus pinitos en las pasarelas con 12 años, ha confesado que sería "rastrero" obligar a trabajar a su hija de dos años, Ever Gabo, insisitiendo en que ella se introdujo tan joven en el mundo de la moda para sacar a su familia de una mala situación económica. "No va a ser una niña que trabaje. Para mí es muy rastrero que los niños trabajen. Yo pertenecía a una familia de inmigrantes de Rusia y necesitábamos prosperar. Mi madre vio mi talento y quiso sacar lo mejor de él. Pero Ever no tiene por qué trabajar. Quiero que mi hija sea sólo una niña, que vaya al colegio y poco a poco vaya encontrando su pasión", ha explicado la modelo. Jovovich se está replanteando su carrera para pasar más tiempo con su familia. "Estoy estableciendo mis prioridades, no puedo dedicarme a la pasarela y al cine y además tener tiempo para mi familia", ha dicho la modelo y actriz, que también recalca lo difícil que es mantener a su pequeña lejos de los objetivos de los fotógrafos.